Avanza con fuerza el incendio forestal que se iniciaba en Montixelvo esta misma tarde. En estos momentos las llamas se dirigen a la zona de la sierra, hacia el término de Llocnou de Sant Jeroni y también Ador y Villalonga. En principio no corren peligro los núcleos de población, pero todo apunta a que la zona montañosa va a ser arrasada por el fuego. Evidentemente, todo dependerá de si se mantienen las actuales condiciones climatológicas, así como la dirección del viento.
El incendio se ha producido en el Barranco La Font en el término de Montitxelvo y se ha desplazado hasta el municipio vecinos avivado por el fuerte viento
La población de Terrateig está siendo evacuada debido a la cercanía de las llamas a la población, como consecuencia del incendio que se inició sobre las 16:30 horas de la tarde en el barranco de la Font entre este término municipal y el de Montitxelvo.
La alcaldesa, Silvia Ferrer, anunciaba a los vecinos de la necesidad de abandonar el municipio debido al estado el fuego y el fuerte viendo que está soplando. De hecho, las llamas ya han llegado hasta las instalaciones deportivas del municipio.
La primera edil ha instado a los varios centenares de vecinos que tiene el municipio a coger lo imprescindible e informaba que aquellos vecinos que no tuvieran donde ir ni familiares en otros municipios que les acogieran, que se dirijan a Benicolet donde el Ayuntamiento ha ofrecido un espacio para albergarlos.
El incendio se inició en un principio en el término de Montitxelvo pero el viento ha trasladado las llamas hasta el pueblo vecino, por lo que, a no ser que se produzca un cambio en la dirección del viento, esta población no corre peligro. La gran humareda y las llamas puede verse en otros municipios de la comarca. Dada la situación, también está cortada la CV-60.
El alcalde de Benicolet, Iván Martínez, se ha puesto a disposición de la alcaldesa de Terrateig. De momento han habilitado la Casa de la Cultura, el centro multiusos Casa del Salvador y la planta de arriba del Ayuntamiento para acoger a los vecinos de Terrateig.
El viento, con rachas que se acercan a los 100 kilómetros la hora, está complicando la extinción, dado que los medios aéreos no pueden actuar.