Minuto de silencio a las puertas del Ayuntamiento de L’Olleria en memoria de las víctimas del trágico accidente de tren ocurrido en Angrois,  Santiago de Compostela.  Estampa que se repite en toda España,  son los minutos de silencio más largos y sentidos que se recuerdan.  Quizás desde la muerte de Miguel Angel Blanco en el 97′, o el 11 M que consternó al mundo,  no recordabamos un sentimiento de tanto pesar y tan generalizado.  Baste recordar que en el tren viajaban, gentes de multiples sitios y varias nacionalidades.

En lo que a la Comunidad Valencia se refiere  el  «saldo» dos muertos, un desaparecido y tres supervivientes, implicados en el accidente. Cada uno con su historia particular,  historias con las que nos sentimos identificados en muchas de ellas, y por lo que algunos sentimos como si un «trocito» nuestro viajase en ese tren a pesar de no conocer directamente a ninguna de las victimas.

Es un «golpe» como muchos que recibimos y recibiremos en nuestras vidas,  pero que en los momentos más dolorosos, nos hace mas «reflexivos»,  un minuto de silencio, no solo nos permite recordar con respeto la memoria de las victimas,  también nos recuerda…..               que coger o perder un tren es una cuestión de segundos.