: Inicio » Economia y Turismo, Portada » La buena fé, de dar información a extraños.

 

Y es que ya pasaron los tiempos en que se dejaba la puerta de  casa abierta,  y todos en el pueblo se conocían.  Atrás quedan los tiempos en que cuando preguntaban por alguien, hasta lo acompañábamos al domicilio. Sin embargo, hoy en día la información es poder, y seguramente por nuestra “inocencia” aportamos más de lo que deberíamos.  

Sirvan unos cuantos ejemplos para darnos cuenta de como se aprovechan de nuestra amabilidad para obtener datos.

La telellamada.  Casi siempre  funciona por cantidad  (a más llamadas más posibilidades),  no suelen sonsacar ninguna información,  pero debería tener cuidado con aquellos que si preguntan muchas cosas o directamente están haciendo una encuesta con datos.  Les está dando información,  información que luego podrán vender,  a compañías de venta directa,  que sabrán más de usted de lo que imagina. Esa información es la que permite mandar una cuadrilla de vendedores a las puertas de las casas de una localidad determinada.

Los vendedores de “puerta fría”  (los pelmazos que se aparecen en la puerta), Aquí debemos distinguir cuatro tipos de “agentes”.    Los que  se buscan la vida con este oficio, mientras no encuentran algo mejor, (acaban tan quemados, que no vuelven a llamar ni al  timbre de su casa ).  Los de las grandes compañías (hidroeléctricas, gas, seguros), que se ciñen cansinamente a un guión preestablecido. Los depredadores  que para venderte una enciclopedia alimentarán su codicia con todo tipo de regalos,  y los auténticos pelmazos, que no venden nada (casi siempre religiosos).

Los “peligrosos” son los depredadores, vendedores de material tan invendible como obsoleto (enciclopedias, colecciones, etc)  instruidos previamente a prescindir de escrúpulos,  bailan impunemente entre la venta y el engaño. Sus “piezas” más codiciadas son las personas mayores,  a ser posible con nietos  y  jóvenes parados en su familia. Si además viven solos,  nadie cuestionará su puesta en escena.  Suelen desembarcar en manada,  la típica furgoneta, que abre la puerta y como si de un nido de águilas se tratáse, los sueltan a por sus presas.

La perfección se consigue con una llamada previa de teléfono, (aquí ya van sacando información ) donde solo por atenderlos te van a llenar la casa de regalos,  (una forma de asegurarse que tendrán la puerta “abierta” cuando vayan) en el mejor de los casos  los regalos se los cobran en los portes  (lo único que se tiene que pagar. ¡¡¡Un regalo, me ha tocado !!!,   cuatro porquerías que no le hacían falta), en el peor de los casos …………un águila visitará tu puerta. Donde además de realizar su “trabajo”  intentará obtener pequeñas reseñas (toda la información que pueda) de sus vecinos y familiares.   Aquí es donde debe  tener cuidado de no señalar a vecinos  o familiares vulnerables a este tipo de visitas  (personas mayores, que vivan solas sobretodo)

Caso aparte son los representantes de seguros, hidroeléctricas y el dichoso gas natural,  que están obligados a contar lo que les manda la compañía.  (no disponen del manual de técnicas de venta de los anteriores).  Pero tampoco es bueno soltarle datos sobre los demás, pues sin darse cuenta puede estar tratando con un “falso” comercial englobado en el siguiente apartado.

Estafadores del Gas y de la Luz.  Últimamente están siendo noticia, la visita de falsos técnicos de hidroeléctricas  y otras compañías que vienen simplemente a cambiar el contador,  suelen saber donde vive gente mayor, (se ván documentando sobre la marcha), y son verdaderas estafas,  que se previenen  primero advirtiendo a nuestros mayores, y luego convenciéndolos de que cuando reciban alguna visita de este tipo llamen a alguien cercano puesto en el tema. Pero tenga en cuenta, que este tipo de gente,  para llegar a su víctima, no siempre és al azar, muchas veces van recabando “datos”, en otras puertas con otros temas,  de ahí la expresión….”se van documentando sobre la marcha”.  Antes de «delatar» donde vive gente mayor sola, (sin darse cuenta)  tómese un segundo de reflexión y piense como se llegó a esa respuesta.

Cobradores , detectives , y presuntos funcionarios judiciales, para ellos un pueblo es un chollo, pues solemos ser demasiado amables con la gente foránea, a cualquiera que le pregunten algo sobre alguien, siempre de buena fe, le acabarán contando hasta donde se hace la partida,  y ojo este tipo de gente no siempre viene por que alguien debe, o quieren averiguar de un sospechoso,  muchas veces  el sospechoso es el que quiere averiguar algo de alguien, o el cobrador busca a quien le puede empaquetar lo que no pagan otros. Es decir, creyendo que le están haciendo un favor a un vecino, es probable que lo estén perjudicándo seriamente.  En estos tiempos a un forastero (preguntón) de vá de paso,  solo se le debería indicar donde está el Ayuntamiento  y la hora si la pide. Si son gente sería y debidamente acreditada al primer sitio al que van…  es precisamente  el Ayuntamiento.

Se puede cometer el error de que aportándo datos crea vá a obtener información  (cotilleo puro y duro), olvídelo,  si trata con un profesional,  e intuye su sed de información,  tratará de animarle compartiendo detalles, que seguramente ni serán verdad, con el único fin de obtener lo que busca: información.

Facebook y otras hierbas. Nuestra buena fé  (y de paso nuestra ignorancia) también se vé reflejada en el Facebook,  cuando aceptamos la amistad de personas que no conocemos de nada,  (sobre todo desconfíe de aquellos que tienen toda su información oculta. Antes de aceptar  compruebe  quien és) estamos compartiendo nuestra vida con ellos, entre otras cosas, cuando nos vamos de viaje,  como tenemos la caseta, cuando nos vamos de boda,  y un montón de datos, que un extraño jamás debería saber.  Lo importante es estar conectado con familiares, amigos, conocidos, etc,  De nada vale tener 2000 amigos, si sólo conoces y tratas con 50 salvo que quieras promocionar algo, o tu página sea de interés general.

Los “miranda”.  Si usted ve a un desconocido observando la entrada de Sta. Maria Magdalena, es probable que esté contemplando y disfrutando de esa maravilla.  Pero,  si mira un desconocido, observando  con el mismo deleite y rondando una caseta. No dude que la pregunta del millón que le harán si se tercia es  ¿sabe si esa es la casa de… cualquier nombre?,  generalmente si el nombre es inventado , casi nos están invitando a que le digamos de quien y añadir el resto de datos,(otro vez nuestra buena fe al servicio del mal posiblemente)  están fuera, están de vacaciones, casi no vienen, lo encontrará el fin de semana…..etc,  O  las intenciones son de volver con una linterna a la noche, o bien volvemos al caso de querer sacar más información a saber con que fin.    

Estos son unos pocos ejemplos de lo que nos vá rondando en esta época,  ni mucho menos es como para ver fantasmas en todas partes, pero si sería bueno de que empecemos a tomar conciencia de que no todo el monte es orégano,  L’Olleria a pesar de su gran tamaño, mantiene esa excencia  de pueblo. Tenemos la ventaja de que aquí, sabemos quién es del pueblo , y quien de la casa,  para el resto……..precaución.  Piénselo dos veces antes de derrochar toda su amabilidad aportando todo tipo de detalles sin saber  a quién y para qué se los dá.

Tenga presente que muchas de estas cosas parece que siempre  le pasan a los demás pero si no ayuda advirtiéndolo, o corrigiéndolo, tarde o temprano… nos acabará pasando a todos, ya que donde triunfa un cazador de datos , siempre acaban  volviendo a por más.

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